Querida
Isabel,
Gracias por enviarme esta preciosa fotografía y,
sobre todo, por abrir las páginas de El diario de Ena. La paciente que
escribía. 
Saber que alguien como tú —que ha dedicado su
vida al mundo sanitario— se adentra en esta historia me emociona especialmente.
Ojalá, al acompañar a Ena en su recorrido entre
pasillos, silencios y renacimientos, encuentres también un reflejo de tantas
realidades que solo quienes habéis vivido de cerca ese entorno comprendéis del
todo.
Deseo de corazón que disfrutes cada capítulo, y
que la vida de Ena te hable al alma tanto como a mí me habló al escribirla.
Con cariño, Eva Mª Maisanava Trobo
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por dejar tu comentario. Para mí es muy importante.