Sería
difícil describir lo que siento.
Mi
hermana, mi Tata, mi mundo... me acuerdo del día en que la conocí, pensé... cómo
habré podido ser su amiga si ella es Enfermera y yo no tengo nada más que EGB.
Mil complejos de inferioridad que me han acompañado mucho tiempo hasta conocerla a ella; que me enseñó a conocerme y a quererme más. Ambas, en este camino, de más de 11 años, nos hemos ayudado, respetado, comprendido. Es difícil que alguien me pueda entender como tú...
Por
siempre jamás…
Nos
conocemos desde hace mucho tiempo
y
me acabo de dar cuenta
de
que jamás
ni
un solo poema te he dedicado.
En
cambio, si lo hecho,
por
impulso,
con
otras personas,
para
nada merecedoras
de
entregarles un jirón de mi alma
a
quién no lo aprecia
y
aún menos lo valora.
Más,
que mi Tata, eres mi hermana
ese
ángel “especial” que apareció
en
mi vida para enseñarme la mejor lección,
a
quererme, a valorarme y a mostrarme como soy.
Eres
esa enfermera
que
lleva tiempo luchando,
en
una dura batalla,
sin
perder el ánimo
ni
la sonrisa,
ni
su gran sentido del humor.
Permíteme
que sea ahora,
esa
enfermera,
que
aún en la distancia
con
sus audios
y
con sus letras,
logre
hacer que te sientas
un
poco mejor.
El
camino,
como
la vida,
no
es fácil,
pero
juntas
y
cogidas de las manos,
lucharemos,
frente
a cualquier obstáculo.
Sé
que nos volveremos a ver,
porque
“dos hermanas”
separadas
al nacer
han
de abrazarse,
reírse
y
hasta llorar
sin
ton ni son.
Porque
sólo Dios es conocedor
de
lo que tú y yo sentimos:
Una
unión más allá,
de
lo que cualquier simple mortal,
hipócrita
y falso,
jamás
podrá experimentar.
![]() |
Una imagen vale más que mil palabras |
No hay comentarios:
Publicar un comentario